Fundación Libertad y Desarrollo publicó el informe "El sistema electoral guatemalteco. Representatividad, distritos electorales y fórmula electoral."
El jueves 4 de abril, Fundación Libertad y Desarrollo publicó el informe El sistema electoral guatemalteco. Representatividad, distritos electorales y fórmula electoral, una investigación que analiza el funcionamiento del sistema electoral guatemalteco y las consecuencias derivadas de las reformas electorales aprobadas en 2016.
Dionisio Gutiérrez, Presidente de Fundación Libertad y Desarrollo, indica en las primeras páginas de la publicación que “nuestra intención y nuestro deseo es informar al ciudadano para que enfrente mejor preparado el desafío que es la democracia; y contribuir a la formación de investigadores, periodistas, docentes, líderes políticos, empresarios y sociedad civil, quienes son, al final, las élites de las que Guatemala tanto espera y necesita.”
La investigación destaca que el sistema electoral guatemalteco ha demostrado poseer muchas falencias, como la asimetría en la magnitud de los distritos que genera distorsiones en el sistema de representación dentro del Congreso; un sistema de votación por medio de listas cerradas y bloqueadas que ha favorecido tendencias caciquistas y clientelares al interior de los partidos políticos; o la falta de legitimación de algunos alcaldes. Esto se pretendió enmendar en la reforma a la Ley Electoral y de Partidos Políticos del 2016, sin embargo el camino sigue siendo largo y los efectos en el ciclo electoral del 2019, todavía están siendo medidos.
Phillip Chicola, Director del Área Política de Fundación Libertad y Desarrollo dijo que “la reforma electoral del 2016 estableció un sistema de elección de diputados rígido y que rompe con los principios de representatividad; además que al no resolver las asimetrías en los tamaños de distritos electorales, donde bancadas muy grandes se alimentan de los distritos pequeños y bancadas muy pequeñas se alimentan de los distritos grandes, vamos a tener congresos ingobernables con excesiva fragmentación, pero también con bloques mayoritarios artificialmente establecidos.”
Después Daniel Haering, Director del Área Académica de Escuela de Gobierno, comentó: “Esto es un reflejo de cómo la reforma electoral no ha partido de un análisis crítico, respecto del modelo al que se aspira, que también es un reflejo de que existe una institucionalidad cooptada por ciertas agrupaciones políticas que diseñan las reglas del juego según sus respectivos intereses políticos.”
El informe busca continuar con el debate público sobre las reformas que el sistema electoral guatemalteco aún necesita, tales como un rediseño sistemático del modelo de distritos para las elecciones de diputados; una revisión de la fórmula para la conversión de votos en escaños; y otros sistemas de listados para la elección de diputados que le permitan al votante mostrar aún mejor su preferencia por uno o varios candidatos.
Descargue el informe en versión digital aquí: