Esta semana hablamos sobre el aniversario de Razón de Estado y la captura del sistema de elección de magistrados para la Corte Suprema de Justicia y de Apelaciones por parte de mafias y estructuras criminales.
El programa inició con el editorial de Dionisio Gutiérrez a propósito del aniversario de Razón de Estado: “En estos días, Razón de Estado cumplió un año de estar con ustedes. Un año en el que Guatemala siguió buscando alivio a sus dolores y solución a sus problemas. Desde esta tribuna intentamos dar un aporte a la claridad, al análisis serio, al compromiso con la verdad y a la defensa de nuestras libertades.”
Explicó los problemas a los que se enfrenta el país en la actualidad: “hoy nos enfrentamos a la amenaza del secuestro del sistema de justicia y a la consolidación del imperio de la impunidad (...) La democracia guatemalteca está herida y sus instituciones no alcanzan para ser el remedio que necesita. El discurso público vive tiempos marcados por el abaratamiento de la verdad y la pérdida de honestidad. Vivimos, dicen, la era de la post verdad; que realmente, es la era de la mentira.”
Por último llamó a la reflexión sobre el futuro del país: “con el inicio del segundo año de Razón de Estado, me parece honesto proponer que nos cuestionemos si las generaciones de hoy, estamos fracasando en la construcción de la idea que es Guatemala.” Y aseguró que “desde esta tribuna, también afirmamos que seguiremos comprometidos con la verdad, con el Estado de Derecho y con la Libertad; los fundamentos de la democracia.”
Después Gutiérrez entrevistó a Helen Mack y a Luis Fernández Molina sobre la cooptación del sistema de justicia guatemalteco y los vicios en el proceso de elección de jueces para las altas cortes del país.
Luis Fernández Molina explicó que “estructuras y mafias criminales dentro de las comisiones de postulación no están buscando debilitar la justicia, sino que quieren cooptarla para colocar a sus peones en los tribunales, y no les importa si califican o no.” Además, mencionó que la expulsión de CICIG del país es la oportunidad perfecta para que el actual congreso “liquide y nombre a los magistrados que velarán por sus intereses, ya sea personales o económicos.”
A propósito de la nueva comisión en el Congreso para evaluar los resultados de CICIG, Helen Mack aseguró que “todo lo que habíamos logrado quiere ser destruído por los diputados y la comisión actual. El nuevo pacto de corruptos busca derogar o modificar todas las reformas que se hicieron porque los amenaza; no les gusta la figura del colaborador eficaz ni los tribunales de alto riesgo porque no les conviene tenerlos. Seguir legislando según a los intereses de grupos específicos hace que el país no salga adelante.”
Por último ambos invitados reflexionaron sobre el rol de la ciudadanía en velar por que la justicia del país sea transparente: “Es importante que estemos conscientes de que todos los problemas de salario bajos, de falta de trabajo, las malas carreteras del país, la mala educación, etc. pasan de alguna u otra forma por el sistema de justicia que tenemos”. Aseguraron que la sociedad civil debe activarse para evitar la injerencia del crimen organizado y ayuda así a consolidar un auténtico Estado de Derecho.
Después Edgar Ortiz moderó el debate entre los abogados Diego Marroquín, Elvyn Díaz y José Echeverría sobre la sentencia de la Corte de Constitucionalidad para repetir el proceso de elección para los magistrados de la CSJ.
Una de las conclusiones del debate es que el diseño institucional de la elección de magistrados de las altas cortes en el país, tiene que ser revisado, pues desde su origen ha permitido que estructuras criminales coopten nuestro sistema de justicia y favorezcan la impunidad.
Por último, aseguraron que si bien normativamente no habría diferencia en el hecho de que sea este Congreso o el siguiente el que elija a los magistrados que conformarán las altas cortes del país; sin embargo políticamente nos enfrentamos a que intereses espurios de los actuales diputados se interpongan en la elección de magistrados.